Cancún, Q. Roo, 09 agosto, oder&crítica.– De la misma manera que la Procuraduría General de la República, aseguró y congeló cuentas y bienes del ex gobernador de Veracruz y compinches, prevé aplicar la misma medida contra el ex mandatario de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, preso en Panamá y pronto a la extradición, según dijo el subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la institución, Alberto Elías Beltrán.
El responsable de llevar a cabo un proceso adecuado, en el que no haya rendijas legales por las que pudiera escurrírsele Borge Angulo, confía en que el gobierno de Panamá conceda su extradición, toda vez que México ha respetado en todo momento las formalidades del procedimiento, por lo que espera reciprocidad.
Debe precisarse que la extradición del que ha sido calificado como el más grande saqueador de Quintana Roo, todavía no es un hecho ya que el gobierno panameño cuenta con 60 días para resolver si concede o no su repatriación, hasta en tanto no hay una resolución en firme.
Por otra parte, trascendió que el Ministerio Público Federal, encargado de caso «Borge», ya solicitó al titular de la Unidad Especializada en Investigación de Delitos Fiscales y Financieros de la PGR, Héctor de la Paz Cazares, analice el abultado expediente y solicite a la Secretaría de Hacienda la información complementaria en torno a la fortuna del ex gobernante cozumeleño.
De encontrarse los elementos necesarios para presumir responsabilidad tanto en Borge Angulo como con sus allegados, proceda, siempre apegado a derecho, de la misma manera como se ha hecho con Javier Duarte de Ochoa, al que le confiscaron sus bienes, lo mismo que un mínimo de 10 de sus familiares y amigos.
En el caso de Borge Angulo, se mencionan al menos una veintena de posibles cómplices, entre los que figuran lo mismo sus padres, Roberto Borge Martín y Yolanda Angulo, que su ex esposa Mariana Zorrilla y media docena de familiares políticos, así como sus dos principales operadores financieros: Eliézer Manuel Villanueva Lanz, refugiado en el Líbano y Juan Pablo Guillermo Molina, también fugitivo y familiares cercanos.