En víspera del encuentro de hoy entre el presidente de Estados Unidos y mandatarios de Centroamérica, la Casa Blanca informó que Barack Obama mantuvo ayer contacto con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, a quien considera un socio indispensable para hacer frente a la crisis humanitaria de los niños que migran solos hacia la Unión Americana.
En una conversación telefónica, el mandatario estadounidense trató con su par mexicano la posibilidad de ampliar los programas de cooperación bilateral y compartir recursos para mejorar la seguridad regional, así como de ampliar las oportunidades de desarrollo en la región centroamericana.
“Abordaron la posibilidad de programas regionales que utilizarían recursos para mejorar la seguridad pública e incrementar las oportunidades económicas en Centroamérica”, afirmó la Casa Blanca.
Durante esta conferencia telefónica, el presidente Obama reconoció los esfuerzos de México por reforzar los controles fronterizos en los límites de Belice y Guatemala y el renovado empeño de su vecino del sur por combatir las redes de tráfico de personas que se han convertido en un asunto de seguridad nacional en la región.
“El presidente (Obama) dio la bienvenida a los esfuerzos de México para luchar contra los criminales que convencen a las familias para que envíen a sus niños en un viaje peligroso y alertar a los potenciales migrantes de los riesgos y la probabilidad de que sean devueltos a Centroamérica”, destacó en comunicado la Casa Blanca.
De acuerdo con la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto y Barack Obama coincidieron en tener una visión humanitaria, corresponsable y regional en la atención de la migración infantil hacia territorio estadounidense.
Los mandatarios se comprometieron a redoblar los esfuerzos y a trabajar de manera coordinada para combatir las redes transnacionales de trata de personas.