25 de octubre; poderycritica.- Las denuncias de corrupción en Petrobras y otros escándalos que implican al PT de la presidenta Dilma Rousseff y al PSDB de su rival Aecio Neves calentaron la campaña a un día del balotaje en Brasil, para el cual la mandataria es favorita. Un total de 142-8 millones de brasileños están convocados a las urnas por segunda vez en un mes el domingo.
Tras la campaña más ajustada y sangrienta de la historia reciente de Brasil, Rousseff, una ex guerrillera de 66 años con fama de dura que quiere ampliar los 12 años del PT en el poder, aventaja por entre seis y ocho puntos a Neves, un ex senador y ex gobernador de 54 años proveniente de la élite política brasileña.
La corrupción es uno de los temas clave para definir la elección en este país indignado con los interminables abusos de poder e impunidad de sus servidores públicos, tal como reflejaron las masivas manifestaciones callejeras de 2013.
Aunque con momentos tensos, sin embargo, el ultimo debate de la TV Globo en Rio fue quizás el menos agresivo -no hubo casi ataques personales- y el que tuvo más definiciones claras sobre temas clave, gracias a un formato que permitía preguntas por sorteo de brasileños indecisos en la platea.
Neves acusó a Rousseff de llevar a cabo «la campaña más sórdida» en la historia de Brasil -le ha acusado de nepotismo, de mentiroso, de corrupción, ha insinuado que condujo borracho y drogado- y empezó el debate preguntándole sobre las denuncias de la revista conservadoraVeja publicadas el viernes.
Según Veja, Alberto Yousseff, un empresario preso desde marzo acusado de comandar una gigantesca red de lavado de dinero que incluía los desvíos en Petrobras, dijo a la justicia que el ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) y su delfina política Rousseff «sabían todo» sobre la corrupción en la empresa estatal.
Yousseff y un ex director de Petrobras, Paulo Roberto Costa, denunciaron sobreprecios en contratos de empresas con la petrolera destinados a financiar al PT y a partidos y políticos aliados. Ambos buscan reducir sus penas a cambio de dar a la policía información privilegiada. Sus denuncias no han sido probadas.
«Iré a la justicia para defenderme [de las acusaciones de Veja] y tengo la certeza de que el pueblo brasileño va a mostrar su indignación el domingo votando y derrotando esa propuesta que usted representa y que es un retroceso para Brasil», lanzó la presidenta.
Neves, que se ha defendido de las duras acusaciones de Rousseff con la misma moneda, también le preguntó por qué mantiene en secreto la financiación del puerto de Mariel en Cuba. «Nosotros financiamos una empresa brasileña que generó empleo en Brasil» y construye el puerto, no al gobierno cubano, respondió la mandataria.
«Existe una medida para acabar con la corrupción: ¡sacar al PT del poder!», dijo un enérgico Neves mientras Rousseff torcía la cara, los ‘tucanos’ del PSDB aplaudían y los ‘petistas’ abucheaban.