PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | El pasado 12 de marzo, un hombre de Memphis, Tennessee, recibió un disparo accidental de su propio perro mientras dormía. Según informó la policía el miércoles, el incidente ocurrió en la madrugada del lunes, cuando el dueño de la mascota, acompañado de su pareja, fue alcanzado por el disparo de un arma cargada que el perro activó sin intención.
El can, llamado Oreo y de raza pitbull, saltó sobre la cama y, al quedar atrapada su pata en el seguro del gatillo, presionó el disparador del arma. El disparo alcanzó el muslo izquierdo del hombre, quien afortunadamente solo sufrió un rasguño y fue atendido en un hospital, evitando lesiones graves. El informe policial registró el hecho como una «herida accidental».
Este incidente recuerda otro trágico suceso ocurrido hace dos años en Kansas, donde un perro pastor alemán disparó accidentalmente un rifle de caza, causando la muerte de un hombre de 30 años. En 2018, un hombre de 51 años en Iowa también resultó herido en la pierna por un disparo accidental de su perro, un mestizo de pitbull y labrador.
La policía no ha especificado el tipo de arma involucrada en este último incidente.