A meses para concluir su mandato, el presidente municipal de Othón P. Blanco sigue sin responder a las necesidades de la población
Chetumal.- Si bien es cierto que el pueblo no votó por él y la presidencia municipal le cayó de rebote, luego del fallecimiento de Hernán Pastrana Pastrana, los chetumaleños quieren que pasen rápido los meses para poder salir de una de las administraciones más grises en la historia de Othón P. Blanco.
Para varios chetumaleños decir que las cosas están mal en el municipio no es tan fácil, ya que los dos anteriores gobiernos (Eduardo Abuxapqui y Luis Torres) tampoco fueron como para poder presumir.
Otoniel Segovia ya sido incapaz de atender viejos problemas como es el basurero municipal, la inseguridad en colonias y el exceso de baches en Chetumal.
Para la regidora Mary Hadad, la disculpa de la autoridad municipal es que hay pandemia por el Covid 19 y eso ha limitado el uso de recursos.
Sin embargo, este argumento se cae si recordamos que para la entrega de despensas a la población de Quintana Roo el único municipio que no aportó ni un peso fue Othón P. Blanco.
Otoniel Segovia no ha estado a la altura
La capital del estado vive un periodo complicado con deficiencias en servicios y una administración municipal que no puede dar respuestas a la ciudadanía.
Para el diputado local del Partido del Trabajo, Roberto Erales, el presidente municipal Othoniel Segovia Martínez no ha podido con el paquete, demostrando que no estaba preparado para ocupar dicho cargo.
«La presidencia municipal cayó de rebote, ahí están las deficiencias en toda clase de servicios», afirmó el legislador petista.
Agregó que Othoniel Segovia no ha estado a la altura de Chetumal ni muestra ganas o interés de hacerlo.
«No ha estado a la altura de una ciudad como Chetumal, la capital de Quintana Roo», citó.
Añadió que Segovia Martínez no sólo ha mostrado incapacidad sino que además no ha podido reunir a un equipo que lo ayude.
La última que les hizo a los trabajadores
Los propios empleados del ayuntamiento han padecido de erróneas decisiones de la autoridad municipal.
Por ejemplo, en diciembre pasado hubo quejas por el recorte de entre 400 y 600 pesos de su aguinaldo, sin que se especificara el motivo.