PODER Y CRÍTICA | Fabián Vallado Fernández, quién de secretario particular de Roberto Borge pasó a manejar un red de corruptos para «lavar» más de 11 mil millones de pesos, atribuídos al saqueo del erario público, hoy reaparece como operador político en Puerto Morelos; es la mano que mece la cuna, es el titiritero de Blanca Merari Tziu.Esta es una nueva investigación de PODER y CRÍTICA, donde detallaremos la operatividad del «Clan Borgista» de Fabián Vallado, quien desde Puerto Morelos la tierra que le negó la candidatura a la presidencia municipal, dicta órdenes y lanza su ofensiva de venganza al viejo estilo de Roberto Borge y Félix González Canto.
Sobre Fabián Enrique Vallado Fernández forma parte de la lista de los 65 ex funcionarios del gobierno de Roberto Borge Angulo identificados como presuntos saqueadores o cómplices en el desvió de más de 11 mil millones de pesos que desaparecieron del erario público entre 2011-2016.
Las órdenes de aprehensión se han reactivado, las investigaciones federales por lavado de dinero están en curso y serán letra de cambio en la elección estatal venidera, todo está ligado de manera directa al desvió de fondos del erario público, peculado y enriquecimiento ilícito, entre otras.
Vallado Fernández inició su carrera política en la administración del presidente municipal Alor Quesada, como administrador en el área de comunicación social; posteriormente, con la ayuda de amigos y conocidos fue recomendado para ser el secretario privado de Borge Angulo, durante su precampaña a la gubernatura de Quintana Roo.
De ahí despacharía en la secretaria privada de Beto Borge Angulo, donde inició un cúmulo de actos que a la postre lo hicieron millonario gracias a su habilidad de convencimiento sobre temas específicos.
El saber tanto y haberse convertido en la mano derecha de Roberto Borge Angulo lo llevó a que fuera premiado como Delegado en Quintana Roo de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), puesto desde donde utilizó los recursos federales para complacer a sus amigos y hasta intentar robarle la candidatura a su prima política, Laura Fernández Piña.
Su ambición de poder y su falta de tacto y madurez política lo llevaron a que salieran a la luz pública muchas de las conversaciones que tuvo con algunos personajes de la vida pública, conversaciones por las cuales fue despedido del puesto y se inició una investigación en su contra.
Fabian Vallado estaba de bajo perfil, supervisando negocios y propiedades del ex gobernador, ahora es magnate montado en camionetas blindadas, custodiado por guaruras, disfrutando de riqueza mal habida. Pero cometió el error de querer ser operador político….