TABASCO POLÍTICO
José Luis Gutiérrez Gutiérrez
jlggutierrez@hotmail.com
¿EXCLUIDO, PROTEGIDO O DE QUÉ SE TRATA?
A lo mejor en el Comité Ejecutivo Nacional del PRI no están enterado de que la mayoría del priismo tabasqueño no confía plenamente en ellos, y tiene toda la razón en estarlo, ya que han dejado muchísimo que desear. El respaldo y el apoyo ha sido más de poses y de discursos que de verdad. Por ello la desconfianza que sienten.
Y para acabarla de amolar mandan señales que ponen a los simpatizantes y militantes del tricolor a girar, como es la designación a estas alturas del partido, de Evaristo Hernández Cruz como delegado especial del CEN en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, cuando supuestamente es el que encabeza todas las encuestas para abanderar al PRI en la capital tabasqueña.
Hay que recordarles que en Tabasco el gobernador Arturo Núñez Jiménez ganó la gubernatura representando a todas las izquierdas, y no al PRI. Es cierto de que hace muchos años fue de los mejores operadores priistas, pero desde hace un buen rato renunció al institucional para defender al PRD, por ello mismo en el edificio de Insurgentes Norte no deben andar haciendo experimentos políticos que puede revertírseles.
La primera lectura en torno a Evaristo Hernández Cruz, y la que por cierto ha calado más en sus seguidores, es que el PRI nacional lo sacó de la jugada, lo excluyó de la disputa interna por el Centro, aunque también podría ser que estadísticamente sea ya inalcanzable, y hayan decidido cuidarlo, sacarlo del golpeteo. También se afirma que fue una decisión del CEN del PRI para comprobar su disciplina y lealtad, que con todo respeto, se me hace una jalada.
El meollo del asunto es que este tipo de decisiones no ayudan no solo a mantener la unidad partidista, sino que acrecienta la desconfianza de los priistas hacia la dirigencia nacional, más aún cuando no ha actuado de acuerdo a las circunstancias y condiciones políticas del pasado y presente.
Y los políticos más fríos -la mata da de todo- afirman que el nombramiento de Evaristo Hernández Cruz, es puro “atole con el dedo”, pues va a hacer y actuar exactamente como lo hace el delegado del CEN del PRI en la entidad, Williams Oswaldo Ochoa Gallegos, mejor conocido como: “La Burudanguita”, quien viene cuando puede y quiere, pues la mayor parte del tiempo se la pasa haciendo proselitismo político en la alcaldía tuxtleña.
El CEN del PRI no solo desconoce el sentir de los priistas tabasqueños, sino ni del propio Evaristo Hernández Cruz, pues conociéndolo , estamos segurísimos de que no se va a dejar, si es que en efecto, la decisión de enviarlo a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, conlleva implícitamente su exclusión de la competencia para ser el abanderado priista en busca de la joya de la corona.
Y no nada más el ex diputado y primer regidor de la capital tabasqueña va a pegar de brincos y sombrerazos, pues ninguno de los otros aspirantes se va a dejar, si le han vendido esa idea a César Camacho Quiroz, o a la mismísima Ivonne Ortega Pacheco, pues los tienen vilmente engañados. Si por las buenas la van a hacer de tos, ya se pueden imaginar si tratan de eliminarlos con burdas y baratas artimañas y artilugios.
Ni as bajo la manga, ni nada por el estilo, quienes alzaron la voz, ya tienen rato caminando, y capitalmente consensando acuerdos con el CEN del PRI, y entre ellos mismos, bajarlos del caballo por las malas va a resultar para el PRI: suicida, y en la misma tesitura se van a comportar quienes andan haciendo proselitismo político para las alcaldías y diputaciones, si no, al tiempo.
“SQUOD SCRIPSI, SCRIPSI”
(LO ESCRITO, ESCRITO ESTÁ)
Mientras los titulares de la Contraloría del gobierno del Estado de Tabasco y del Órgano Superior de Fiscalización del Estado (OSFE), Lucina Tamayo Barrios y José del Carmen López Carrera, respectivamente, accedan a sus cargos de la manera como lo están haciendo desde años, la rendición de cuentas de los tres poderes va a ser puro pancho, puro mitote, puro pinche escándalo, pues ni modo que vas a poner en evidencia a quienes les debe el favor de que estés cobrando muy bien, y gozando de las prebendas y canonjías que te dan por ser, ni más ni menos, que el Contralor y el Fiscal de los miles de millones de pesos que se manejan año con año.
El que sean muy, pero muy grotescos, incompetentes, ineficaces e ineficientes, simple y sencillamente complica toda la situación, por lo mismo, nadie, absolutamente nadie, cree en la imparcialidad y objetividad de la Contraloría y del OSFE.
Y cómo creerles, cuando el desempleo y la inseguridad pública continúan creciendo, y la entidad está prácticamente despedazándose, cayéndose. En serio: ¿cómo creerles?, cuando la realidad es tan palpable.