Por: Shmelin Chavez
31 de Oct.- El Día de Muertos es hoy un evento de carácter familiar con un profundo significado: los espíritus de los muertos visitan la tierra, este hecho para ellos es motivo de reflexión. no es algo triste ni horroroso.
En estas fechas, en el interior de México, la gente visita las tumbas de sus familiares y las decoran con cirios y flores, llevan juguetes para los niños muertos y botellas de tequila para los adultos, se acomodan en «mantas de picnic» al lado de las tumbas y toman la comida favorita de sus seres queridos.
En el México urbano y en Estados Unidos, la gente erige pequeños altares en sus hogares, sobre estos altares colocan fotos de sus familiares difuntos rodeadas de velas, candelarias sflores, también suelen poner la música favorita de los seres queridos que se han ido y colocar sobre dicho altar su comida preferida; son humildes ofrendas que gustan a los muertos.
Otros, imitando las viejas tradiciones aztecas más primitivas, colocan sobre esos altares unas calaveras de madera, llamadas calacas, en honor de sus familiares difuntos. También realizan calaveras de azúcar (sugar skulls), para dar a entender que el tránsito hacia la otra vida debe ser algo dulce.
¿Qué son los Muertos Chiquitos?, como curiosidad, muchos creen que en estos días (1 de noviembre y 2 de noviembre), las almas de los muertos vienen al mundo de los vivos; pero Dios quiere que el espíritu de los niños muertos, los llamados angelitos, regresen en primer lugar (sobre el 30 y 31 de octubre, según lugares), antes que las almas de los mayores. Para ellos, para los angelitos o muertos chiquitos, se construyen altares especiales, más pequeños, donde hay copas con salsa no picante y trocitos de “pan de muerto” (bread of the dead), en este caso, el 30 o el 31de octubre se celebra el Día de los Muertos Chiquitos