Cancún Q Roo: Los resultados del “Estudio de la distribución de metales presentes en polvos urbanos de la ciudad de Cancún, Quintana Roo, México”, realizado por estudiantes de Ingeniería Ambiental de la Universidad del Caribe, permiten tomar medidas preventivas para evitar el deterioro de la calidad del aire de la ciudad; además de que podrían ser útiles para la toma de decisiones a nivel gubernamental y apoyar los planes de movilidad urbana, según afirmó la Dra. Laura Margarita Hernández Terrones, quien dirige el estudio en conjunto con Jairo Arturo Ayala Godoy.
Los resultados de la investigación, a cargo de las estudiantes de Ingeniería Ambiental, Mara Fernanda Flores Moreno, Cinthia Berenice Pech Perera y Denisse Guadalupe Sánchez Toriz, tuvo el objetivo de modelar la concentración de metales presentes en polvos urbanos de Cancún, como consecuencia del crecimiento del parque vehicular, diversas actividades industriales y otros factores ambientales, lo cual podría llevar a superar los límites permitidos de contaminación ambiental.
Hernández Terrones precisó que aun cuando el promedio de las concentraciones obtenidas Zinc y Plomo en la ciudad de Cancún, son ligeramente cercanas al promedio de grandes ciudades como (Ciudad de México y Madrid España); esto no significa que se tengan los mismos niveles de contaminación ambiental, ya que esto depende de otros factores.
Mencionó que en la Ciudad de México, por ejemplo, existen otros contaminantes en la atmósfera, la concentración de autos y otros emisores de gases es mucho mayor y se presenta el efecto invernadero. Por su parte, Cancún, por ser una ciudad costera, los vientos permiten que exista la dispersión de los contaminantes.
La investigadora de la Universidad del Caribe recordó que el llamado lanzado durante la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente fue a implementar acciones que eviten el deterioro de la calidad del aire en Cancún.
La investigación de las estudiantes de Ingeniería Ambiental, propone iniciar con un programa de monitoreo de calidad del aire, los polvos atmosféricos incluidos, instalando por lo menos tres estaciones: la primera al Oeste (cerca de una embotelladora), en el centro de la ciudad (Av Tulúm, a la altura de Plaza las Américas) y en el km 3 de la zona hotelera. La siguiente etapa del estudio será el identificar las fuentes de dichos elementos y determinar índices de contaminación y ampliarlo a gases de efecto invernadero a corto plazo.