Villahermosa, Tab. 07 diciembre; poderycritica.-Con un crecimiento real a 24 mil toneladas de cacao entregará el Gobierno del Estado el sector cacaotero que del año 2000 al 2012 registró una pérdida de 12 mil toneladas de producción anual, significando que durante los 4 años de esta Administración se ha recuperado el 80 por ciento de las 30 mil toneladas del año 2000.
Pedro Jiménez León, titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal y Pesquero (Sedafop), recalcó que gracias a la forma diferente de hacer las cosas en la Administración de Arturo Núñez Jiménez, los resultados han sido favorables. “Hemos mantenido la producción de cacao en 18 mil toneladas, detuvimos la caída; lo que sigue es la cosecha de las hectáreas sembradas, tomando en consideración el tiempo que tarda el cacao en rendir frutos, esto es, esas hectáreas que sembramos en el 2013 van a empezar a producir en el 2017, lo que se sembró en 2014 va empezar a producir en el 2018”, y aseveró que “cuando termine el Gobierno de Arturo Núñez Jiménez, estaremos en la ruta de llegar a las 24 mil toneladas de cacao sembradas, la vamos a entregar con un crecimiento significativo”.
El Funcionario Estatal explicó que “en el año 2000, en Tabasco la producción de cacao era de 33 mil toneladas, y ya para 2006 únicamente se registraban a 24 mil toneladas de producción de grano al año, una pérdida de casi 8 mil toneladas; pero en la siguiente Administración cayó de 24 mil a 18 mil toneladas, una caída del 25 por ciento”.
Puntualizó que en relación a qué ha cambiado en la forma de producir cacao y ha permitido esta recuperación, el encargado de las políticas públicas del sector primario de Tabasco recordó el trabajo en conjunto del Gobierno del Estado con instituciones como el Colegio de Postgraduados, así como el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) en Tabasco para el desarrollo de cepas productivas que permitan elevar la densidad de plantas por hectárea, recordando que no se ha realizado el corte de plantaciones antiguas sino el intercalado del material vegetativo genéticamente validado en la superficie que tradicionalmente se cultivaba, pasando de una producción de 200 hasta 800 kilogramos a 1 tonelada por hectárea.