Damasco, 04 Diciembre; poderycritica (Notimex).- El Estado Islámico (EI) atacó una base aérea militar en la provincia de Deir Ezzor, en el oriente de Siria, hecho que originó cruentos enfrentamientos que causaron la muerte de 19 soldados y siete yihadistas, reportaron hoy activistas sirios.
La base aérea de esta provincia fue atacada desde tres direcciones distintas por el grupo yihadista, que además logró hacerse con dos carros de combate, un vehículo blindado, varias piezas de artillería y ametralladoras.
Uno de esos ataques fue con un coche lleno de explosivos conducido por un suicida del EI que estalló anoche en el control de acceso a la base aérea, dejando al menos 19 militares muertos, según los Comités de Coordinación Local y el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Después del atentado, las tropas gubernamentales sirias mataron a siete militantes del EI durante cruentos combates que se prolongaron hasta esta madrugada, con un saldo de siete yihadistas muertos.
Tras el ataque y los enfrentamientos, aviones del régimen sirio lanzaron este jueves al menos 10 ataques aéreos contra posiciones del EI en la isla de Saker y los alrededores de Al Yafra, así como en los barrios de Al Hamidiya y Al Hueiqa, en la provincia de Deir al Zur.
Los yihadistas controlan la mayoría de la rica provincia de Deir Ezzor, pero la mitad de la ciudad del mismo nombre está en manos de las fuerzas gubernamentales, así como el aeropuerto militar.
Ante la situación en Deir Ezzor y otros puntos de Irak, Australia anunció este jueves que considerará delito los viajes sin razón legítima a la provincia siria de al Raqqa, después de que el gobierno endureció las leyes contra los australianos enrolados en el EI.
La canciller australiana, Julie Bishop, que se amparó en las cláusulas de las nuevas leyes antiterroristas, dijo que “una persona que entre o permanezca en una zona declarada (como prohibida) sin una razón legítima afrontará una pena máxima de 10 años de cárcel”.
Bishop, quien estudia la posibilidad de prohibir el acceso a otras áreas conflictivas de Siria, indicó que los australianos que luchan en conflictos en el extranjero “suponen una amenaza para Australia y su forma de vida”.