Hay un Proverbio bíblico que reza: “cordón de tres dobleces difícilmente se rompe”, lo que significa que unidos es menos probables que cualquier situación nos quiebre, nos rompa o nos destruya.
Hoy enfrentamos una pandemia llamada COVID-19 (Coronavirus) de la que no podemos estar exentos porque vivimos en un mundo globalizado y porque Quintana Roo es un destino que recibe a visitantes de todo el mundo, pues esa es la base de su economía al dar servicios turísticos.
Hoy es momento que hagamos a un lado cualquier diferencia política, religiosa, económica o de interés personal que tengamos entre nosotros y cerremos filas en torno a las recomendaciones de las autoridades de salud y de gobierno, pues son ellos los que llevan las directrices de la prevención y tratamiento del Coronavirus.
Ayer, escuché con atención el Plan que presentó el gobernador del estado, Carlos Joaquín González y me quedo con el exhorto que lanza a las instancias federales como son el Instituto Mexicano del Seguro Social (Imss), al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) para trabajar a favor de los quintanarroenses con tratar de disminuir los cobros de los servicios; pero también a empresas privadas como Aguakan, el sector bancario, al Comercial, a los de telefonía celular y a los proveedor de Internet para evitar suspender servicios a los que se vean afectados por la contingencia, que no se les corte el servicio y evitar meterlos en el buró de crédito.
Lo hace en el contexto que en la atribución de sus facultades, en Quintana Roo se les dará estímulo fiscales a empresas que se solidaricen con los trabajadores y eviten despidos; además de diferimentos de pagos de impuestos estatales, reducción a montos a pagar, suspender actos de fiscalización, apoyos regulatorios y aplazamiento de pagos estatales. Además que a partir de abril se le otorgará una despensa para todo el mes a aquellos trabajadores que hayan perdido su fuente de empleo.
Personalmente lo digo, este es el liderazgo del gobernador que Quintana Roo necesitaba ver, un gobernador que toma decisiones, que blinda a los quintanarroenses para mitigar la crisis mundial que se avecina.
Ojalá que de aquí en adelante, ese carácter y liderazgo que vi ayer en su mensaje para informarnos sobre el COVID-19, pueda ser utilizado de aquí en adelante para recomponer cada una de las dependencias del gobierno que a Carlos Joaquín González le toca administrar.
Vamos a unirnos en torno a las autoridades, vamos a unirnos como sociedad haciendo nuestra parte de obedecer las recomendaciones de os expertos en salud, vamos a unirnos para soportar el Coronavirus; pero principalmente vamos a unirnos para levantar este destino turístico para que siga siendo el número uno en México y el preferido del mundo.
SASCAB
Si no tiene a que salir de su casa, no lo haga. Las suspensiones de todos los eventos masivos es una medida, pero de manera individual colaboremos para contener en la medida de lo posible el contagio de este poderoso virus COVID-19.
Opinión de Martín G. Iglesias, Caminos del Mayab