México, 15 septiembre; poderycritica.-El director de World Wildlife Fund México, Eugenio Barrios, sostuvo que ante el ajuste al presupuesto en materia de infraestructura hídrica, se debe pensar en reformas y acciones baratas, a fin de preservar el vital líquido.
En reunión de trabajo con integrantes de la Comisión de Agua Potable y Saneamiento de la Cámara de Diputados, dijo que el reto es crear una nueva Ley General de Aguas que dé certidumbre y claridad para establecer límites al uso de concesiones, con el objetivo de encontrar balances virtuosos y sustentables del recurso.
Urgió a cambiar el principio de gestión del agua, porque eleva el riesgo de desabasto, ya que el actual esquema se basa en la sobrexplotación de acuíferos. Además, resaltó, debe ser prioridad dotar a todos del recurso.
El aumento en las concesiones otorgadas no es la única causa de la sobreexplotación de los recursos hídricos, sino el descuido en la asignación, consideró.
«Si seguimos operando el criterio de asignaciones de escurrimientos del 100 por ciento medio anual, se gestionará siempre el déficit y se pone en riesgo la seguridad hídrica y la capacidad de adaptación al cambio climático, que exigirá crear más infraestructura, situación que se complica con el recorte presupuestario», explicó.
En su participación, el director general del Centro Mexicano de Desarrollo y Ambiental, Gustavo Alanís, propuso un decálogo para garantizar el acceso al agua sin discriminación alguna.
Ello, a fin de que la población que no pueda pagar, la reciba sin costo, priorizando el uso personal y doméstico en la nueva ley general, para proteger y garantizar un abasto de entre 50 y 100 litros diarios por habitante, de forma continua.
Afirmó que se tienen problemas mayúsculos y preocupantes en el sector hídrico por la falta de recursos y pidió a los diputados tomar esto en cuenta.
Además, se debe alentar la planeación progresiva del recurso; establecer partidas presupuestales que estimulen la creación de infraestructura; fijar estándares de calidad y cantidad salubre para consumo personal y doméstico.
De igual forma, acceso seguro y a no más de 100 metros del hogar, y que el costo no rebase el tres por ciento del ingreso de la familia.
Planteó crear disposiciones que armonicen la sustentabilidad financiera de agua potable y su saneamiento, y establecer mecanismos para que las comunidades rurales o lejanas cumplan su derecho al agua, mediante ecotécnicas que den cobertura universal.