México, 13 febrero; poderycritica.-La sesión del Consejo Estatal del PAN en Guerrero se llevó a cabo en medio de una trifulca: dos grupos de panista se enfrentaron a golpes y al dirigente estatal, Marco Antonio Maganda, lo encerraron por más de dos horas.
El enfrentamiento entre los panista se dio en su sede estatal.
El grupo opositor lo encabezó el ex dirigente estatal, Andrés Bahena Montero, apoyado por el diputado local, Iván Pachuca, la esposa de éste, la ex legisladora local, Delfina Concepción Oliva y Lilia Bernal, también ex diputada local.
El otro grupo lo encabezó el dirigente estatal y su esposa la diputada federal, Guadalupe González.
La trifulca comenzó cuando apenas se estaba dando el registro. En la pelea tuvieron que intervenir policías estatales con equipo antimotines.
Los agentes formaron una valla en el acceso de las oficinas para permitir que la sesión del Consejo Estatal se realizara con la presencia de 54 de los 102 consejeros.
Entre esos 54, 20 consejeros son afines al dirigente estatal y con ello se a completó el quórum legal.
El grupo del ex dirigente acusó al actual porque el año anterior no hizo llevar un millón 400 mil pesos a los comités municipales y también, acusaron, pretende que los 32 integrantes de la Comisión Permanente del PAN en Guerrero lo conformen sus allegados.
La Comisión Permanente será la que el próximo año, en 2018, seleccione a los candidatos a las alcaldías en el estado, a la diputaciones locales y las federales.
Los integrantes del grupo de Bahena Montero llegaron con jóvenes encapuchados quienes cerraron la puerta principal y le colocaron un candado.
En respuesta, la diputada federal Guadalupe González pidió la intervención de las autoridades y fue por eso que llegaron los policías antimotines.
Según se supo uno de los panista opositores portaba un arma de fuego.
La ex diputada local Irma Lilia Bernal advirtió que presentaran una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (Codehum) en contra del gobernador Héctor Astudillo Flores porque consideraron la intervención de la policía estatal como un acto de represión.