México, 07 mayo; poderycritica.- La gallina de huevos de oro se está viniendo abajo, y es que la invasión del sargazo en las playas de Quintana Roo es una total tragedia, la industria turística está decayendo gracias a esta alga marina.
Y es que en las últimas semanas en diferentes hoteles de Cancún, Riviera Maya, etc. se han comenzado a registrar cancelaciones de vacacionistas por la obvia incomodidad que provoca el sargazo en sus días de descanso. Y lo que diferentes medios aseguran es que este año llegué más que sargazo que el pasado.
A pesar de todo, este también se considera un gran negocio ya que el gobierno federal ha invertido este año mil millones de pesos para retener la llegada del sargazo y limpiar las playas del caribe.
Quien parece muy interesado en esta situación es Pablo Careaga Córdova, a quien Fonatur designó coordinador del famoso Tren Maya en Quintana Roo, Él y su familia han sido bien beneficiados gracias a la empresa Escudo del Caribe, que se han llevado varios contratos para la titánica tarea de mantener limpios los mares y las playas.
Escudo del Caribe se fundó hace apenas medio año. Con un capital de 10 mil pesos va por un negocio de mil millones. Hoteleros de la zona e incluso funcionarios públicos de alto nivel en el gobierno federal identifican a los dos socios principales de esta empresa como “gente de Pablo Careaga”.
Por si eso no bastara, Careaga le puso de nombre “Escudo del Caribe”, el mismo nombre de la empresa, a la propuesta de estrategia oficial para acabar con la alga marina. Apenas el 13 de abril, la señora Ana Lilia Córdova, madre de Careaga, usó a su Asociación Centinelas del Mar para respaldar a Escudo del Caribe. Y el tío de Careaga, el empresario Francisco Córdova Lira, dueño de la exitosa Río Secreto, se sumó al espaldarazo.
Muchos de los hoteleros de alta importancia han asegurado que esta empresa no cuenta con la experiencia necesaria, la infraestructura, ni el equipo ideal para llevar a cabo el servicio necesario.
Uno de los barcos que presumen como suyos, no es en realidad suyo, según denunció Alejandro De Luna, quien asegura que él diseñó la embarcación para que fuera capaz de recolectar sargazo, y él es el dueño: “Es mi barco. Les mandé una cotización a ellos este año y ellos tomaron fotografías y documentos, pero decir que es de él, pues todavía no llegamos a ningún acuerdo”, relató en entrevista para mi colega Luis Pavón en un reportaje presentado hoy en Despierta de Televisa en el que se expone esta problemática.
La decisión sobre quién se queda con el negocio del sargazo la toma Fonatur. La dependencia a cargo de Rogelio Jiménez Pons administrará los mil millones de pesos. Pablo Careaga trabaja para Fonatur. Es Coordinador del Tren Maya en Quintana Roo. Él ha declarado que Escudo del Caribe (su propia empresa) es la “propuesta más solvente para Fonatur”. El conflicto de interés luce evidente.
Ayer lunes el presidente López Obrador anunció que hoy recibe al titular de Fonatur y a los involucrados en el asunto del sargazo. Imagínense que el negocio se lo termine llevando alguien de Fonatur.
Sin duda Pablo Careaga va por los huevos de oro, producto del sargazo.
Fuente: Columna- Carlos Loret de Mola para EL UNIVERSAL