Chetumal, Q. Roo, Lunes 12 de Octubre del 2020, poderycrítica.- El Ayuntamiento de Othón P. Blanco, que encabeza Otoniel Segovia Martínez, tiene en abandono la playa artificial Dos Mulas, a pesar de ser uno de los pocos centros de esparcimiento familiar en la capital del estado.
Esta playa artificial fue construida en el sexenio de Joaquín Hendricks Díaz y durante el trienio de Moisés Pacheco Briceño, junto con la que se ubica en la zona restaurantera de la comunidad de Calderitas.
Sin embargo esta es la que presenta los daños más severos y es a la que más acuden las familias chetumaleñas, sobre todo los fines de semana.
Los atractivos principales son los que presentan el mayor deterioro. Se trata de la zona de playa que ha sido rebasada por hierba, que se en algunos puntos se ha convertido en zona de lodo y que por sus condiciones en algunas áreas se han colocado cintas amarillas de precaución.
Además de que el puente que fue colocado sobre las placas de cemento que impiden el deslave de la poca arena que queda, está en cerca del 85 por ciento destruido y ya no se puede caminar sobre de él. El puente se ha vuelto riesgoso para los visitantes pues hay clavos, maderas frágiles y con punta que en cualquier momento pueden provocar un accidente de consideración.
Sin embargo, las familias chetumaleñas siguen acudiendo al balneario pese al riesgo, pues en la capital es el único espacio público de ese tipo que se tiene para pasar un rato de esparcimiento, ya que el balneario de Punta Estrella solo ha quedado como un punto de referencia de la ciudad, pero que además menos cuenta con las instalaciones adecuadas.
Pese a las condiciones de la playa artificial, el Gobierno Municipal de Othoniel Segovia Martínez, no contempló en su último año de gobierno, 2021, y en el Plan Inversión Anual (PIA), ningún recurso para su rehabilitación.
Ni siquiera se cuenta con un proyecto o estimado de recursos que se requieren para ello, pues informó que hay cosas más importantes que atender. Asimismo reconoce que por su estado no puede ser impulsada como un atractivo turístico de la capital.
La última vez que se dio mantenimiento a “Dos Mulas” fue hace casi seis años, la inversión ascendió a más de siete millones de pesos.