5 de septiembre; poderycritica.- El secretario de Medio Ambiente, Juan José Guerra Abud, adelantó que se aprovechará el gas de los desechos del bordo poniente para la generación de energía eléctrica y así mantener parte de las operaciones del nuevo aeropuerto.
“Se estará revisando la generación de gas de los desechos para que cuando se agote se coloquen biodigestores y seguir con la generación de electricidad para el nuevo aeropuerto”.
Guerra Abud detalló que la recuperación de áreas verdes para la creación de un pulmón ecológico en este perímetro del aeropuerto será mayor al del bosque de Aragón. “Este va a ser un pulmón importante para Valle de la capital”.
Comunicaciones y Transportes
El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, aclaró que el gobierno federal no realizará más expropiaciones a los municipios del Estado de México para la construcción del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
“Los pobladores que se encuentran en las zonas aledañas a los terrenos que ya tiene el gobierno federal no tienen nada de qué preocuparse, no habrá más expropiaciones”.
Al dar más detalles sobre la construcción de la nueva terminal aérea, el funcionario federal dijo que se llevaron a cabo 40 estudios de suelo, que comenzaron en el 2013.
“En 2013 este gobierno le solicitó a MITRE, agencia de estudios aeronáuticos la más importante del mundo, y al MIT de Massachusetts que llevaran a cabo un estudio sobre la zona donde estaba planeado el aeropuerto. Algo muy relevante era analizar si era posible adecuar la ubicación del nuevo aeropuerto dentro de los terrenos federales.»
«Después de 8 meses hicieron las simulaciones y de norte a sur y de sur a norte y no como estaba de oriente a poniente y fue cuando nos dijeron que si era posible”.
Recordó que de 2007 a 2012 se llevaron a cabo estudios de prefactibilidad y viabilidad aeronáutica.
Obras contempladas por Conagua
El director de la Comisión Nacional del Agua, David Korenfeld, aclaró que las obras que se llevarán a cabo a los alrededores del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México ya están previstas.
“Las obras estaban contempladas por Conagua en mediano y largo plazo hace muchos años, hoy lo que vamos hacer es dar mayor seguridad hídrica y ampliar las capacidades de desalojo para evitar los derrames”.
Recordó que en la zona de la nueva terminal aérea hay mil 700 hectáreas con aguas negras y pluviales por lo que se tendrán tres nuevas plantas de tratamiento para incrementar los volúmenes de la producción agrícola de esa parte.
Recordó que desde el inicio de esta administración se han llevado distintos estudios hidrológicos junto con la Universidad Nacional Autónoma de México.
Se tendrán nueve cuerpos de regulación con una capacidad de 38 millones de metros cúbicos de agua.