Poder y Crítica | Redacción | Aunque las autoridades municipales aseguran que cumplirán con los compromisos financieros heredados, las deudas que enfrentan Cozumel y Othón P. Blanco están lejos de poder resolverse, pues en el caso de la isla, tuvo un incremento de 3% en la tasa de interés, mientras que en la capital del estado apenas cuentan con los recursos para cumplir con el mínimo.
De acuerdo con la tesorera del Ayuntamiento isleño, Irma Noemí Tun Celis, la tasa de interés pasó del 6% al 9% por la volatilidad de la economía en este ejercicio fiscal. “Se cumple, por el momento, con el tabulador de pagos”, afirmó la responsable de las finanzas.
Cuestionada sobre cómo afrontarán los empréstitos con los pocos recursos que cuenta el Ayuntamiento, ya que el adeudo tiene comprometidos 431 millones de pesos de los ingresos programados en el ejercicio fiscal 2023 que son de 750.9 millones de pesos, la funcionaria aseguró que siguen en análisis de las medidas. Lo único que sí aseguró es que no se solicitará ningún otro crédito para pagar las deudas, tal como lo hizo la administración anterior.
Tun Celis aceptó que Cozumel es uno de los municipios más endeudados de la República Mexicana, pero, gracias al buen manejo de las finanzas se busca se someta ese endeudamiento al semáforo que implementa la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a nivel federal, que actualmente asigna a Cozumel el color amarillo.
“No hay intención de contratar deuda, pero sí se va a buscar una mejora en la forma del pago de intereses (…) hay finanzas sanas y estables”, remató.
En tanto, regidores del Cabildo de Othón P. Blanco coincidieron en señalar que si bien no hay recurso en las arcas municipales como para trabajar en la disminución de la deuda pública, tampoco se ha dejado de cumplir con los pagos mensuales, precisamente para evitar que el monto ascienda.
José Ángel Muñoz González, décimo segundo regidor, indicó que desde el inicio de la administración se tomaron medidas drásticas para contrarrestar la precaria situación económica que se enfrentaba, y que la deuda pública se vuelva una “bola de nieve”.
Indicó que el pago de la deuda del Ayuntamiento representa arriba del 70% las participaciones mensuales que se le transfieren a la Comuna.
“Prácticamente no se tienen margen, por lo que se tomaron medidas muy drásticas para tener flujo y enfrentar los primeros compromisos al inicio de la administración, no había camiones recolectores de basura y se ocupaba más de un millón de pesos mensuales para la renta de 10 camiones”.
Enfatizó que, si bien no se cuenta con el recurso suficiente para ir a la par con la solución de los problemas más visibles, como el bacheo y alumbrado público, también es cierto que de acuerdo a las posibilidades económicas se han atendido estas problemáticas, hecho que no ocurrió en años anteriores.
Lidia Esther Rojas Fabro, décima cuarta regidora, expresó que se ha trabajado para que la deuda pública no sea un impedimento para que el Ayuntamiento cumpla con sus responsabilidades, situación que, aseguró, se ha logrado con una estricta aplicación de austeridad.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos del Ayuntamiento de Othón P. Blanco para el 2023, de los unos mil 121 millones 918 mil 382 pesos autorizados por los integrantes del Cabildo, un total de 864 millones 646 mil 187.01 pesos será para el gasto corriente y la amortización de la deuda pública y disminución de pasivos.
El gasto corriente, las erogaciones que se destinan al pago de remuneraciones y servicios al personal, así como a cubrir otros gastos de carácter administrativo se “comerá” 784 millones 869 mil 123.36 pesos del presupuesto aprobado.
Mientras que la amortización de la deuda pública y disminución de pasivos restará otros 79 millones 111 mil 63.65 pesos.
