Cancún, Q. Roo, miércoles 11 de noviembre de 2020, poderycrítica.- La marcha del 9 de noviembre de 2020 fue convocada por las familiares de una joven asesinada que había sido reportada como desaparecida. La población cancunense pero en particular las mujeres, que saben lo que es vivir el peligro de las calles en un estado en que los periódicos han reportado al menos 60 muertes violentas de mujeres en el presente año, respondieron al llamado de las familiares. Los grupos feministas de la entidad apoyaron la organización y la logística para demandar justicia, capacitación al personal que atiende violencia y un alto a la impunidad.
A esta demanda justa y genuina, los cuerpos de seguridad respondieron con armas de fuego, desatando una balacera que tuvo como saldos cuatro personas heridas y momentos de terror por quienes exigían y exigen justicia. Hace años no se veía en el país una agresión a una marcha con la violencia de esa anoche.
A la marcha asistieron nuestros estudiantes hombres y mujeres jóvenes, maestros y maestras de nuestra universidad, personal administrativo que se solidariza con las víctimas y sus familiares, ejerciendo con su hacer una ciudadanía responsable en la que las mujeres puedan vivir una vida libre de violencia y en total e irrestricto respeto a sus derechos.
Por nuestra comunidad, por los familiares de las víctimas, en general por todas las mujeres del estado, demandamos una respuesta civilizada a los planteamientos de terminar con la violencia feminicida.
Abramos espacios de diálogo, generemos condiciones respetuosas y responsables para la construcción y respeto a acuerdos que permitan disminuir la impunidad y con ello la violencia hacia las mujeres.
Conocimiento y Cultura para el Desarrollo Humano