Poder y Crítica | Redacción | La propuesta de elevar un 20 por ciento el salario mínimo dispararía aún más la inflación en el país, que se encuentra en niveles no vistos en más de dos décadas., señalan expertos.
El pasado 24 de noviembre la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) instaló una sesión permanente de su Consejo de Representantes para acordar el incremento y montos del salario mínimo que estarán vigentes el año entrante.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha mencionado que espera que el incremento sea del 20 por ciento, sin embargo, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), un aumento demasiado elevado o abrupto en los costos laborales podría impedir que la inflación, que actualmente se encuentra por encima del 8 por ciento, regrese a su nivel objetivo –de 3% ±1 punto porcentual–.
“O incluso impulsar en mayor medida, desatando una espiral inflacionaria en la que los salarios empujan a los precios”, destacó.
Recordó que en los últimos cuatro años el salario mínimo en la frontera norte pasó de 88 a 260 pesos diarios, mientras que en el resto del país el incremento fue de 88 a 173 pesos diarios, ambos incrementos relevantes.
“Más que basarse en buenos deseos, la decisión del incremento a los salarios mínimos debe basarse en principios técnicos y estudios con evidencia”, dijo el IMCO.
En la primera quincena de noviembre la inflación general en el país fue de 8.14 por ciento.
El componente no subyacente se desaceleró, con una tasa de 6.62 por ciento, la más baja desde marzo de 2021.
Sin embargo, el subyacente se encuentra en su punto más alto desde el 2000, con 8.66 por ciento.