Bolivia, 03 julio; poderycritica.-El cementerio público de Cochabamba, centro de Bolivia, ampliaba su capacidad a todo vapor este jueves tras quejas de funerarias sobre la acumulación de cadáveres de muertos por COVID-19 en casas y morgues, ante la imposibilidad de enterrarlos.
Máquinas retroexcavadoras realizaban perforaciones en el cementerio general de Cochabamba para habilitar más tumbas, observó un fotógrafo de la AFP, mientras el único crematorio de la ciudad estaba saturado.
«Hemos habilitado 250 espacios para que podamos tener cobertura y para la próxima semana tendremos 500 espacios más» entre tumbas bajo tierra y nichos sobre la superficie, señaló a la AFP el secretario de Gobernabilidad de la alcaldía, Edwin Paredes.
Fosas de unos 40 metros de largo y más de uno de ancho se utilizarán «para las personas indigentes», dijo el funcionario, asegurando que se trata de una vieja práctica en ese cementerio.
Funerarias de Cochabamba se habían quejado de que el crematorio municipal estaba saturado y el cementerio no tenía más espacio, por lo que decenas de cuerpos permanecían en sus casas.
«En domicilios hay más de 40 cuerpos esperando fecha de cremación», afirmó Carlos Orellana, presidente de la Asociación Privada de Funerarias de Cochabamba, ciudad de unos 710 mil habitantes.
Cochabamba es la tercera región más castigada por coronavirus, después de Santa Cruz (este) y Beni (noreste). Acumula hasta la fecha tres mil 744 contagiados de un total nacional de 34 mil 227 y 221 muertos de mil 201.