Villahermosa, Tab. 02 marzo; poderycritica.-El costo promedio por Infecciones Asociadas a la Atención de la Salud ronda entre los 4 mil y los 8 mil dólares, advierte
El senador Fernando Mayans Canabal planteó una serie de medidas con el objetivo claro de prevenir y reducir el riesgo de infecciones nosocomiales a través de insertar en el funcionamiento del sistema de salud el hábito de la higiene de manos.
El legislador del Grupo Parlamentario del PRD destacó la importancia de realizar estrategias que favorezcan el cambio de cultura del personal de salud, de manera que integre a su trabajo cotidiano la higiene de manos como un hábito permanente.
“Este cambio es complejo y requiere de tiempo por el aspecto conductual y del entorno, asimismo, el tema es considerado como un asunto menor, por lo que los tomadores de decisiones subestiman esta acción y no dimensionan la importancia que realmente le corresponde”, reiteró.
Lamentó que el actual sistema de salud no realice una política armonizada en la materia, donde las diferentes instituciones compartan metas e indicadores comunes que resalten la importancia de un hecho tan sencillo y elemental como lo es la higiene de manos para abatir las infecciones nosocomiales.
Al fundamentar su iniciativa, el legislador por el estado de Tabasco resaltó que las Infecciones Asociadas a la Atención de la Salud (IAAS) pueden contraerse por pacientes durante su tratamiento en un hospital u otro centro sanitario y por consecuencia se genera un alta morbilidad y mortalidad, asimismo implican una afectación social y financiera importante para las instituciones de salud.
“Más de 1.4 millones de personas en todo el mundo, adquieren este tipo de infecciones. En México, se calcula que se producen anualmente 450 mil casos de infecciones nosocomiales, término reconocido la normatividad vigente causantes de 32 defunciones por cada 100 mil habitantes”, advirtió.
Informó que las IAAS a nivel hospitalario constituyen el principal evento adverso, entre el 5 por ciento y 10 por ciento de los pacientes hospitalizados en los países de ingresos altos adquieren una o más de estas infecciones, mientras que, en los países de ingresos bajos y medios, el riesgo de contraerlas es hasta 20 veces más alto.
Fernando Mayans agregó que el promedio del costo de los casos sin infección es de 35 mil 168 dólares con un promedio de 4.4 días de estancia hospitalaria, mientras que para los casos con infección es de 191 mil 872 dólares y 19.7 días.
Advirtió que México carece de estudios que permitan evaluar a fondo estos aspectos, sin embargo, aseguró que existen datos que pueden orientar la magnitud del problema.
“Se calcula que 450 mil 000 casos de IAAS causan 32 muertes por cada 100,000 habitantes por año. Una revisión realizada en instituciones de salud (SSA, IMSS e ISSSTE) mostró una prevalencia general del 21%, mientras el costo por cada caso de infección está calculado entre 4 mil 200 a 8 mil 990 dólares”, subrayó.
La vigilancia epidemiológica de las IAAS en México, expuso, está a cargo de la Red Hospitalaria de Vigilancia Epidemiológica (RHoVE) cuyos registros en 2009, registraron 37,258 casos de IAAS, lo que implicó un gasto aproximado de 160 millones de dólares, que representaron casi el 2 por ciento del presupuesto total asignado a la Secretaría de Salud y el 96 por ciento del rubro asignado para gastos de operación en unidades médicas.
“La mayor proporción de infecciones notificadas fueron bacteriemias, 23.4 por ciento, y neumonías, 20 por ciento, los servicios con mayor incidencia fueron Medicina Interna, Cirugía General y Unidad de Cuidados Intensivos”, dijo.
Finalmente, Mayans Canabal subrayó que las infecciones nosocomiales contraídas a partir un problema de salud pública en cuanto a la educación de higiene en las manos generan un alta morbilidad y mortalidad, con un impacto económico y social importante en una patología que puede ser prevenible.
“Aunque existen múltiples acciones para prevenir las infecciones, la más sencilla y de mayor impacto es la higiene de manos, por lo que es preponderante crear políticas públicas que aseguren una práctica permanente por parte de los trabadores de la salud, pacientes, familiares y visitantes”, concluyó.