Poder y Crítica | Redacción | “¡Muchas felicidades!” deseó el presidente Andrés Manuel López Obrador ante el anuncio de la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, que se casará con su compañero Jesús María Tarriba.
“¡Felicidades, muchas felicidades! Todo lo que sea estar contentos, alegres, felices, debe celebrarse. No hay que enojarse ni andar con cara dura ni amargados, mucho menos frustrarse. Hay que decir gracias a la vida que nos ha dado tanto”.
Aunque no confirmó si asistiría a la boda de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que desde hace años no asiste a una ceremonia, casamiento o bautismo, porque dichos eventos le quitan mucho tiempo.
“Eso es otra cosa, por lo general yo no asisto a ceremonias, ni bautizos, ni bodas, pero desde hace años. Porque me invitan mucho, y entonces pues tendría yo que dedicar bastante tiempo”.
Señaló que desde hace años, él mismo no se pertenece, pues es un servidor público de tiempo completo; sin embargo, “eso es válido hasta finales de septiembre de 2024”, cuando termina su mandato.
Al respecto, subrayó que hay buenos cuadros dentro de su partido para ser sus sucesores. “Ya hay relevo, y estoy contento porque son muy buenos los que van a entrar al relevo, van a resultar hasta mejores, porque ya se desbrozó el camino”.
Además de Sheinbaum, el propio mandatario ha dicho que otros dos funcionarios de su gobierno que tienen las credenciales para sustituirlo son los secretarios de Gobernación, Adán Augusto López; y de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard. Incluso se ha referido a los tres aspirantes como corcholatas.