Chihuahua, 13 Octubre; poderycrítica (Notimex).- El área médica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua recomendó una vida saludable, para disminuir el riesgo de sufrir un infarto al corazón.
El coordinador auxiliar de Salud Pública del IMSS Chihuahua, Ismael Rodríguez Chávez, indicó que es importante que la población lleve una dieta balanceada, limitar el consumo de sal, grasas saturadas y colesterol (carnes rojas, leche entera y huevos).
Además de que en las comidas incluya frutas, verduras, legumbres, cereal integral y pescado, así como procurar reducir los niveles de estrés mediante la práctica de respiración consciente y ejercicio físico al menos 30 minutos diarios.
Rodríguez Chávez comentó que es necesario acudir a revisión médica a los módulos PrevenIMSS, ubicados en las unidades de Medicina Familiar, por lo menos una vez al año; dejar de fumar y limitar el consumo de alcohol.
El funcionario enfatizó que los actuales estilos de vida ocasionan que este padecimiento afecte cada vez a más adultos jóvenes, incluso menores de 40 años.
Por lo tanto, afirmó que es de vital importancia identificar los síntomas que se presentan cuando ocurre un infarto, los cuales son, principalmente: En algunos casos pérdida del conocimiento, sudor frío, mareos y náuseas, así como debilidad o fatiga.
También dolor u hormigueo en los brazos (más en el izquierdo), dificultad para respirar, dolor del tórax, así como presión o dolor en el centro del pecho, en la mandíbula, hombro, espalda y estómago.
Indicó que identificar estas manifestaciones, permite al afectado o a algún acompañante pedir ayuda a los cuerpos de emergencia y auxiliar al paciente para que llegue al hospital; recibir la atención médica que requiere.
Mientras la ayuda especializada llega, el paciente y su acompañante deben mantener la calma, despojarle de prendas o artículos que le aprieten o impidan la circulación sanguínea, así como recibir aire fresco.
Además de insistir en el comando verbal “respira: todo va estar bien”.
Resaltó que las personas mayores de 40 años, sobre todo quienes sufren de sobrepeso, diabetes, hipertensión, tienen niveles altos de colesterol, son fumadores y llevan una vida sedentaria tienen alto riesgo de sufrir infartos.
El especialista puntualizó que los minutos entre las primeras manifestaciones físicas y la consumación del infarto son vitales para recibir el auxilio especializado y salvar la vida.