Poder y Crítica | Redacción | En el segundo día de supervisión de las obras del Tren Maya, el presidente Andrés Manuel López Obrador se volvió a subir al convoy, sin embargo, un imperfecto provocó que estuviera varado por más de una hora sobre las vías, provocando un retraso de dos horas en su agenda.
Fue en el tramo de Mérida a Yucatán cuando en tren detuvo su marcha por al menos una hora y 15 minutos; con AMLO, viajaban Maite Ramos Gómez, directoral de Alstom México, empresa constructora del tren, un militar y el empresario Daniel Chávez.
Asimismo, Daniel Asaf, jefe de Ayudantía del presidente López Obrador; Javier May, titular de Fonatur y encargado del Tren Maya; Jorge Nuño, secretario de Comunicaciones y Transportes (SICT). Además, Germán Martínez, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y Manuel Bartlett, director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El día de ayer, durante el primer día de pruebas, López Obrador estuvo acompañado del empresario mexicano Carlos Slim, con quien también sostuvo una reunión tras emitir su Quinto Informe de Gobierno.
Medios que se encontraban en la zona, señalaron que un militar se limitó a decir que se trataba de “pruebas”, cerrando la puerta inmediatamente. Igualmente, indican que cuando varios reporteros se acercaron al tren, unos militares trataron de impedir que grabaran el hecho.
Fue cerca de las 16:45 horas que el convoy reinició su recorrido, a una velocidad de cerca de 30 kilómetros por hora, para llegar al sitio arqueológico de Chichén Itzá, donde se llevará a cabo la ceremonia de Recuperación de la Memoria y la Grandeza de la Civilización Maya.