PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Ayer martes, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular reformas a la Constitución para prohibir la reelección consecutiva y el nepotismo electoral a partir de 2030, y no en 2027, como propuso inicialmente la presidenta Claudia Sheinbaum.
La reforma modifica los artículos 55, 59, 82, 115, 116 y 122 de la Constitución, estableciendo la prohibición de reelección para diputados federales, senadores, diputados locales, presidentes municipales, regidores y síndicos de los ayuntamientos.
Durante la discusión, Morena y sus aliados rechazaron modificar el proyecto aprobado por el Senado, lo que llevó a la oposición a calificar la postergación de la reforma como una «simulación».
Postura de los partidos
La vicecoordinadora de Morena, Gabriela Jiménez, defendió la reforma y afirmó que su partido modificará sus estatutos para prohibir la postulación de cónyuges y familiares de funcionarios en funciones, asegurando que la medida se aplicará desde las elecciones de este año en Durango y Veracruz, así como en 2027.
Por su parte, legisladores del PAN y Movimiento Ciudadano criticaron que la medida entre en vigor hasta 2030, señalando que el nepotismo en México debe erradicarse de inmediato.
«El combate al nepotismo debe ser real, no solo un discurso. No más gobiernos con clanes familiares. México necesita instituciones sólidas e independientes, no dinastías políticas que se perpetúan en el poder, como ha ocurrido en estados como Zacatecas, Guerrero y San Luis Potosí», afirmó el panista Armando Tejeda.
Con la aprobación de esta reforma, se busca garantizar elecciones más transparentes y equitativas, evitando que el poder se herede dentro de las familias.