15 de septiembre; poderycritica.- Sumido en una crisis política, ideológica, pero sobre todo moral, el Partido Acción Nacional (PAN) festeja este martes sus 75 años de vida envuelto en numerosos escándalos por la actitud de varios de sus dirigentes y militantes que lo mismo se han visto involucrados en presuntos actos de “moches” por exigir comisiones para canalizar recursos del presupuesto, o bien, por fiestas con mujeres donde corre todo tipo de alcohol, y hasta por golpear personas en el marco del Mundial de Futbol. Eso sin mencionar a los panistas que se disfrazan de nazis y posaron en las redes sociales.
La confrontación entre los dos grupos que se disputan el control del partido (calderonistas y maderistas) no se terminó con la contienda interna por la dirigencia nacional del PAN y las fricciones se agudizan en no pocas ocasiones con costo para la imagen del blanquiazul, sobre todo de cara a las elecciones del 2015 donde se renovará la Cámara de Diputados y nueve gubernaturas.
Para el presidente nacional del PAN, Gustavo Madero, la crisis de imagen que enfrenta el partido es producto de “una falsa narrativa” estructurada por los medios de comunicación. Si bien reconoce que como toda organización el PAN enfrenta diversos problemas internos, advierte que es la “falsa narrativa” estructurada por la prensa la que exagera casos de corrupción, divisiones internas o escándalos de militantes, buscando “engañar con pedazos de verdad”.
Sin embargo, muchos panistas de los llamados doctrinarios, como el ex presidente de la República, Felipe Calderón, acusaron en días pasados y con motivo de los escándalos en que se han visto envueltos varios dirigentes y militantes, que hay una degradación y descomposición en su partido.
“Me da tristeza y pena. Yo lo que veo es un proceso de degradación y descomposición moral, y de corrupción que no sé qué límite pueda tener. Pena y vergüenza, no hay nada más qué decir”, aseguró en el marco de la presentación de libro Los retos que enfrenta México.
El ex dirigente de ese partido, Luis Felipe Bravo Mena, coincide en que hay una degradación moral y ética en el interior del blanquiazul y advierte que en los comicios de 2015 se pondrá a prueba la restauración de un PAN que hoy se percibe dividido, disperso, sin alma y alejado de los ciudadanos. Bravo Mena presentó en días pasados su libro Acción Nacional, Ayer y Hoy, donde hace un análisis de por qué el PAN perdió las elecciones presidenciales y concluye que las crisis internas, el ejercicio del poder, la llegada de personas contrarias a las causas del partido y una degradación ética contribuyeron a deformar el espíritu del blanquiazul con la sociedad.
En estas condiciones, el PAN llega a su 75 aniversario, sin mucho qué festejar, envuelto en escándalos que merman su credibilidad ante la sociedad y con serios cuestionamientos al liderazgo de Gustavo Madero de cara a los retos que significan el crecimiento y sobre todo fortalecimiento del blanquiazul para llegar al 2015 y 2018 con posibilidades reales de disputar la Presidencia de la República al PRI.
“En el 2018 sabremos si el ‘panismo’ sobrevivió y alimenta el alma de la institución con motivos espirituales en la ‘brega de eternidad’ del siglo XXI o el PAN se transformó en la especie que se devora desde la cola”, sentencia Bravo Mena en su libro.