PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Después de las múltiples denuncias que se han hecho sobre el actuar de la empresa CADU Inmobiliaria, la que cotiza en la bolsa de valores, la que atraviesa la peor crisis desde su creación hace 20 años, ahora es denunciada de cometer ecocidio en dos complejos departamentales de lujo dentro de Puerto Cancún.
En denuncia enviada a Poder y Crítica se documenta que Manuel Araiza Luévano, director de Operaciones de CADU, sobornó a las autoridades federales estatales y municipales para los permisos para poder construir los condominios de lujo.
Se asegura que Araiza Luévano, el hombre denunciado de predicar la fe cristiana y practicar los placeres de Sodoma y Gomorra fuera de su hogar, fue quien entregó fuertes sumas millonarias a funcionarios, principalmente estatales y municipales.
En el caso de Allure, rellenaron y derribaron más de 10 metros de manglar para poder pilotear y hacer un embarcadero de navíos pequeños.
La acusación señala que un funcionario de Sofemat habría operado para “arreglar” los permisos y por los cuales habría recibido para distribuir más de 25 millones de pesos entre diversas autoridades
En el Caso de Blume, la operación se repitió, pero con una cantidad superior no especificada ya que aparte del relleno para la torre compuesta de cuatro módulos de parlamentases, se “agarraron” la parte de la alberca y el ambarcadero”.
La denuncia dice que Pedro Vaca, es quien opera directamente los sobornos y los “puentes” para que no tengan problemas con sus construcciones, sin embargo, ambos complejos ya presentan problemas de los cuales daremos cuenta.