Caracas, 09 Marzo; poderycritica (Notimex).- Al conmemorarse dos años de su muerte a raíz de un cáncer, el líder socialista Hugo Chávez se mantiene “vivo” en las calles de esta capital gracias a los numerosos murales en los que se recuerda su legado.
Los críticos, sin embargo, afirman que los murales “no son espontáneos”, sino que se financian con recursos gubernamentales y por ello estas obras suelen florecer en muros de las instituciones públicas o en obras financiadas por el Estado.
Chávez, quien gobernó Venezuela desde 1999 hasta su muerte en marzo de 2013, se caracterizó por intentar impulsar un modelo “socialista” que buscaba mejorar el nivel de vida de la población más pobre.
Sin embargo, sus opositores lo acusaban de tener inclinaciones autoritarias -incluso dictatoriales- ya que se usó el poder del Estado para favorecer a Chávez en los procesos electorales y para perseguir a los opositores.
Los murales han sido dañados en numerosos ataques con pintura, como sucedió hace varios meses en las cercanías de la Universidad Nacional Experimental de las Artes (Unearte) en el centro de Caracas.
“Una mañana amaneció el mural manchado con pintura y lo que parecían disparos como de balas de ‘paint-ball’, pero ahí mismo fue arreglado por el gobierno y quedó como si nada”, recordó Carlos Pimentel, una transeúnte que frecuenta la zona.
La prontitud con que el gobierno rescata los murales es vista con suspicacia por aquellos críticos de Chávez, quienes la contrastan con la desidia de las autoridades para atacar la inseguridad o el problema de la basura.
Sin embargo, aquellos que defienden el legado del “comandante eterno” aseguran que esto es necesario para que el pueblo siga teniendo presente al exgobernante ante los intentos de la oposición de “borrar el legado” de Chávez.
“Ellos (los opositores) quieren borrar el legado del comandante Chávez y por eso destruyen los murales”, subrayó Andrea Mena, quien considera que el gobierno debe rescatar estas pinturas “mil veces si hace falta”.
Más allá de que las obras puedan gustar a unos más que a otros, lo que queda claro es que esta suerte de “muralismo chavista” seguirá siendo parte del arte urbano caraqueño en el futuro cercano.