Monterrey, 9 Oct. (Notimex).- Con un espectáculo cargado de mucha adrenalina y baile sensual, Ricky Martin enloqueció al público regiomontano que no paró de bailar y ser partícipe de la fiesta que el puertorriqueño ofreció anoche en esta ciudad.
En el primero de sus dos conciertos como parte de su «tour» «Live in México» y luego de tres años de ausencia en la ciudad, el intérprete consintió a sus más de 12 mil 500 seguidoras reunidas en la Arena Monterrey con los mejores éxitos de su carrera.
Acompañado de su grupo de bailarines conformado por tres hombres y tres mujeres, el artista prendió al público, en su mayoría femenino, tan pronto apareció en el escenario vestido con un traje gris para interpretar «Come with me».
Con «Shake» los ánimos se elevaron y el público ya de pie no dejó de apoyar a su artista que siguió con el ritmo con «Adrenalina» y luego tranquilizar a su fans con «Vuelve».
Tras una breve pausa y desaparecer del escenario, Ricky Martin regresó para hacer vibrar a la Arena Monterrey, marcando el ritmo y la energía que transmitió a través de sus temas como «Livin’ la vida loca», donde hizo aparecer un auto convertible plata en el escenario.
A bordo del automóvil y siempre con su movimiento de caderas, el puertorriqueño siguió con «Revolución», dejando luego solos a sus músicos y volver al escenario posicionándose en lo alto del mismo y continuar con «It’s alright» para finalmente proseguir con «Dime que me quieres».
Demostrando sus habilidades de baile, el cantante se relajó y ofreció una parte romántica entre luces tenues color azul y humo blanco, en donde el público lo acompañó en un coro enorme para cantar temas de antaño como «Tu recuerdo», en la que se hizo acompañar de un guitarrista.
«Somos la semilla», «Tal vez», «Todo queda en nada» y «Fuego de noche, nieve de día», marcaron el romanticismo de la velada que desapareció tan pronto se escucharon los acordes de «Vida».
La fiesta llegó a su clímax con los clásicos temas que han proyectado al artista a la fama mundial como «Lola», «María», «La bomba» y «Por arriba», con la cual hizo participar al público en su baile e invitó a seguirlo en su coreografía.
Finalmente, con «Cup of life», la fiesta parecía que llegaba a su final, pero ante los ánimos encendidos y peticiones del público, el artista culminó su presentación con «A medio vivir».
