PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | El gobernador Carlos Manuel Merino Campos encabezó este viernes la conmemoración del 177 aniversario de la Gesta Heroica de los Niños Héroes de Chapultepec, en el marco de una ceremonia en la que las fuerzas armadas refrendaron su lealtad e institucionalidad a quien a partir del 1 de octubre se convertirá en la primera Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
Acompañado del comandante de la Trigésima Zona Militar, Héctor Francisco Morán González, y el jefe de Estado Mayor de la Quinta Región Naval, Sergio Reyna Barrios, el mandatario estatal honró la memoria de los Cadetes del Heroico Colegio Militar que en 1847 defendieron, desde el Castillo de Chapultepec, la soberanía nacional de la invasión norteamericana.
En un emotivo acto cívico, pueblo, gobierno y fuerzas armadas reconocieron la valentía y amor por su patria de sus héroes, durante el pase de lista de honor conformado por el teniente Juan de la Barrera y los cadetes Juan Escutia, Agustín Melgar, Vicente Suárez, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, así como por el teniente José Azueta y el cadete Virgilio Uribe, estos dos pertenecientes a la Heroica Escuela Naval Militar.
El discurso oficial estuvo a cargo del comandante de la 7ª Región Militar, José Joaquín Jiménez Cueto, quien tras ofrecer una reseña histórica de los acontecimientos ocurridos el 13 de septiembre de 1847, renovó el compromiso de servir a la Nación por parte de quienes conforman el Ejército Mexicano y la Marina Armada de México.
“Somos institucionales, servimos a los intereses del pueblo y de la Nación misma, y somos liderados por quien determinó el pueblo de México a través del sufragio efectivo, eligiendo hoy a la primera Presidenta y Comandante Suprema de las Fuerzas Armadas, a quien con orgullo y esmero serviremos con lealtad e institucionalidad”, sentenció.
Jiménez Cueto dejó claro que los militares y marinos seguirán “siendo dignos herederos de aquellos que ofrendaron su vida por el futuro de nuestra tierra; continuaremos su ejemplo, trabajando día a día, para fortalecer un México más justo, unido y próspero”.
Apuntó que la unión de la Patria es y será sin discriminación y sin distinción de género, y mencionó que la conmemoración de esta gesta heroica constituye un timbre de honor y gloria, único en su género dentro de la historia universal, y forma una de las páginas más brillante de la historia de México.
José Joaquín Jiménez expresó que en medio de un mundo globalizado donde los retos políticos, económicos y sociales son cada vez más complejos, la defensa de nuestra soberanía sigue siendo crucial.
Ahora –observó– corresponde a la juventud luchar con el arma poderosa de la preparación, la educación y el estudio constante, con inteligencia, dedicación y responsabilidad, para obtener los cimientos necesarios que los hagan técnicos y profesionistas capacitados en todas las ramas del saber para que la Patria tenga seguridad.
En la fiesta patria efectuada frente a las seis estelas que componen el Monumento a los Niños Héroes, la joven Reyna Gabriela León Ocaña, alumna del plantel 27 del Colegio de Bachilleres de Tabasco, declamó la poesía “Fanfarria a los Héroes”, mientras que una sección de fusileros del 37º Batallón de Infantería efectuó la “salva de honor” en memoria de quienes ofrendaron su vida en defensa de México.
La ceremonia culminó con la guardia de honor y la colocación de ofrendas florales por parte de los representantes de los tres poderes del Estado.
Asistieron el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Enrique Priego Oropeza, así como el presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado, Marco Rosendo Medina Filigrana y los secretarios de Gobierno, José Antonio de la Vega Asmitia, y de Cultura, Ramiro Chávez Gochicoa, entre otros.
