PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Más de 50,000 personas recibieron órdenes o advertencias de evacuación debido al incendio Hughes, que ha consumido 15 millas cuadradas de vegetación cerca del lago Castaic, al norte de Los Ángeles. A pesar de la rápida propagación del fuego, los bomberos han logrado contener parte del avance gracias a una intensa respuesta aérea y terrestre.
El jefe de bomberos del condado, Anthony Marrone, destacó que la situación es más favorable que en incendios recientes, ya que los vientos no son tan intensos. No se han reportado estructuras dañadas hasta el momento.
Más de 31,000 personas fueron evacuadas y otras 23,000 permanecen en alerta. Las autoridades también advirtieron sobre la posible llegada de lluvias, lo que podría provocar flujos de lodo en áreas afectadas.
Los incendios Palisades y Eaton siguen activos, con al menos 28 muertos y 14,000 estructuras destruidas.
Agencias







