LA COLUMNA DEL DOCTOR MOHENO-MISCELÁNEA DE CABALLADAS

Se de dos nuevas iniciativas!? de los diputados que pueden salvar al país. Una: aumentarse el sueldo. Dos: que la edad mínima para ser diputados se baje a dieciocho años. Les faltó la tercera: que sean más pendejos que los actuales. Pero como estaba difícil, no la propusieron. Bien dicen que no hay nada peor que un P con iniciativa. No cabe duda que de los gastos más infames del país son los sueldos de los diputados. Las leyes ya están hechas. Son muy buenas, pero no se aplican. Habría que desaparecer a las cámaras de diputados y senadores y buscarles otro oficio. Ya hay un nuevo recorte para el 2017 de 175,000 millones de pesos y nuestros in- útiles congresistas no se atreven a legislar a fondo para lo que se nos viene encima. Casi cien mil burócratas para fuera, que tampoco sirven para nada, pero comen y se reproducen. Y Peña Nieto preocupado por que pueda haber terrorismo con los deshechos nucleares e invirtiendo dinero para una futura Secretaría del Espacio Exterior. Parece broma. No cabe duda que hemos tenido muchos políticos aldeanos: manejar a Tabasco como el Edén de México no tiene madre. Cuarenta grados. Terrible humedad. Corrosión (y corrupción). Archipiélago de Aguas estancadas. Mosquitos. La zona más insalubre del país. Y aldeanos chismosos, incultos y envidiosos. Amo a mi tierra, pero no se vale engañarnos y autocomplacernos para fines políticos. Ya bastante daño nos hizo la política. La división y el odio que generaron en la sociedad los pleitos de Andrés Manuel y el maratonista de Berlín aún siguen dañando a Tabasco. Que maravilla que Gerardo Gaudiano no conteste insultos, no se bata de lodo ni denigre a nadie. Él puede unirnos. No me cabe duda. Leo que cuarenta millonarios neoyorquinos quieren pagar más impuestos. Yo generaría esa iniciativa, pero no soy diputado ni millonario. Lástima, Margaret. No puedo matar a mis padres por entrar a un club de huérfanos. Otra prueba de lo brutos que nos consideran los políticos a los tabasqueños es , por ejemplo, el intento de Alí de ser Gobernador por hacer el Museo Elevado. Mutsevi creo se llamaba y se apodaba charrasqueado. No visitamos los museos de planta baja. Menos los elevados. Ay. mojito! Hágame usted el favor. Peladito y en la boca. Cómo no han acometido nuestros últimos gobiernos los problemas graves de la Ciudad? Se pasaron planeando y prometiendo por veinte años las salidas y entradas de Villahermosa, que hasta ahora se están haciendo y terminando. Es como lo de la Tenencia. Se prometía en campaña y se olvidaba al Gobernar. Hasta ahora se cumplió. En el sexenio de Madrazo por hacer ahorros para la campaña presidencial se hizo un tianguis anexo al Mercado Pino Suárez, que si bien alivió poco y por poco tiempo ese gran problema citadino, ahora es ya un grave problema de salud, de tráfico, de seguridad, de imagen etc. Etc. Cómo no resolvieron ese problema? Tá difícil, dicen. Los locatarios no se quieren ir de ahí, dicen también Claro, digo yo. Ellos quisieran que se les mandaran las ganancias a su casa. El que se cría en la basura no ve la basura. He ido en mis viajes a muchos mercados en Europa, EEUU y Canadá. Pinches güeros! Se comen la basura o se la meten quien sabe dónde. Nunca la he encontrado. Y me esconden los topes. Creen que me van a engañar. Me alarma el que digan que van a remodelar el Pino Suárez. Me imagino a una viejita vendiendo hoja de tó en las escaleras eléctricas o un elevador lleno de basura y manchado con sangre de puerco. Noooooo. Ahí cerca hay miles de hectá- reas. No pueden meter a cuatro hipopó- tamos en un chevy. Es científicamente imposible. En las fiestas a las que voy en Villa, de la alta sociedad, a veces veo quince gentes en una mesa para diez. Inseguridad social. Aldeanos del Edén ??. Sólo se sientan con conocidos. O como el General Anaya que le dijo al general Scott (creo así se llamaba el gringo de la batalla de Churubusco), “ cuando éste le pidió las municiones tras la rendición, le contestó Anaya: si hubiera parque no estuviera usted aquí”. El polvorín estaba a cincuenta metros. Anaya en inferioridad militar se rindió porque estaba perdido. Peleó bien. La historia consigna la frase. Así que le digo a Nuñez y a Gaudiano, las mesas son para diez y los cartuchos están cerquita. Ustedes son leídos y escribidos. No hagan remiendos. Quiten los puestos del arroyo y las banquetas. Pero denles otra opción. Y RECUERDEN: DIOSITO MANDÓ A SU UNIGÉNITO (tuvo un solo hijo). CRISTO NO SE LLENÓ DE HIJOS Y MIREN LO QUE HIZO !!. ADÄN Y EVA SÓLO TUVIERON DOS HIJOS. SIGAN ESOS EJEMPLOS,HIJOS MÍOS