Cancún, Q. Roo, 25 septiembre, poder&critica.-Hace dos semanas, Pablo Azcárraga Andrade, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), aseguró que el llamado Impuesto por Internación iba por buen camino; ahora, el sector turístico de Cancún rechazó nuevos gravámenes; en cambio, exigió un buen manejo de los recursos y transparencia por parte del gobierno estatal.
El pasado martes 5 de septiembre, el también director general del grupo hotelero Posadas, estuvo en Cancún para asistir al Cancún Travel Forum, donde dijo que era una medida extraordinaria aplicable a los extranjeros que ingresaran vía aérea a los destinos turísticos del país con aeropuertos internacionales.Entonces declaró que el llamado Impuesto por Internación 25 dólares que se cobrarían vía Derecho al no Residente (DNR), que ya se aplica al visitante internacional; actualmente se cobran 390 pesos por persona), era para que México no perdiera competitividad.Sin embargo, hoteleros y prestadores de servicios turísticos del municipio de Benito Juárez manifestaron su rechazo a nuevos gravámenes y calificaron de “absurdo” el “Derecho de Saneamiento” que quiere cobrar Solidaridad a gente que no vive en el lugar, y lamentaron los inconstitucionales como uno que dejó Gregorio Sánchez Martínez a los cancunenses.
En bloque, la iniciativa privada rechazó las iniciativas para imponer nuevos gravámenes al sector. Por ejemplo, Carlos Gosselin Maurel, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos, acusó que, en el caso de Cancún, “tenemos cero promoción, cero transparencia, en dónde está el dinero».
“A mí que no me vengan a decir ahorita que descubrieron que las arcas las dejaron vacías (tras el gobierno de Roberto Borge Angulo) y que no tienen dinero; durante la campaña política debieron analizar la situación para comenzar a gobernar”, sostuvo.
En tanto, el presidente del Museo Subacuático de Arte (Musa) y cónsul honorario de Hungría en Quintana Roo, Roberto Díaz Abraham, señaló que “no estamos de acuerdo en que se pague otro impuesto al turismo de los que ya hay».
“A los visitantes hay que darles incentivos, favorecerlos, y los impuestos son para recaudar o desincentivar. Ya los que se recaudan son muchísimos y se deben administrar bien y no pensar en ver cómo los seguimos castigando”, externó el también escultor.
Por su parte, Sergio González Rubiera, dirigente de la Asociación Mexicana de Agencias de Viajes (AMAV), capítulo Cancún, declaró que más gravámenes serían una aberración y no se aceptarán más. “Si no hay alternativa lucharemos contra la Federación, porque que ya hay una lista interminable de impuestos que el sector privado paga».
“Sólo el sector náutico paga 62. Tenemos impuestos inconstitucionales, como el municipal que dejó Greg Sánchez: 10 por ciento sobre las contribuciones del cancunense, hasta por ir a sacar licencia; dos por ciento sobre nómina, que ya es del tres; el de vivienda, el Impuesto al Hospedaje y ahora viene esa ocurrencia (la del CNET)”, lamentó.
Los demás empresarios añadieron que no hay contrapropuesta, sólo la negativa a que se sigan incrementando los impuestos, pues la carga tributaria es ya demasiado pesada: “No hay alternativa; no habrá más impuestos en Quintana Roo”, sostuvieron.
También estuvo Elsa Miriam Cortés Franco, presidente ejecutivo de la Asociación de Clubes Vacacionales de Quintana Roo (Acluvaq); Ramón Roselló, vicepresidente ejecutivo de Inverotel (hotelería española) e Iván Ferrat Mancera, de los Asociados Náuticos de Quintana Roo (ANQ), coincidieron en que no dejarán pasar “la ocurrencia” de Pablo Azcárraga.
Quintana Roo obtendría cerca de 425 millones de dólares o siete mil 590 millones 500 mil pesos anuales con el llamado Impuesto por Internación, que se cobraría mediante el Derecho al no Residente (DNR), que ya se aplica a cualquier visitante internacional y que sería de alrededor de 25 dólares (actualmente se cobran 390 pesos por persona).
