PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Lluvias torrenciales registradas durante las celebraciones navideñas generaron inundaciones repentinas en distintas regiones de California, consideradas entre las más severas de la temporada, lo que llevó a las autoridades a emitir alertas por deslaves y a declarar estado de emergencia en varios condados, incluido Los Ángeles.
El fenómeno meteorológico es impulsado por un río atmosférico conocido como “Expreso Piña”, una corriente de aire cargada de humedad proveniente de Hawái que ha descargado en pocos días volúmenes de lluvia equivalentes a varios meses. El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) advirtió que las precipitaciones intensas continuarían hasta este viernes 26 de diciembre, acompañadas de fuertes vientos.
De acuerdo con el NWS, existe un riesgo moderado de lluvias excesivas en el sur del estado, con alta probabilidad de inundaciones repentinas, particularmente en zonas que recientemente fueron afectadas por incendios forestales, donde el suelo presenta mayor inestabilidad.
Las autoridades del condado de Los Ángeles exhortaron a la población a extremar precauciones, señalando que las carreteras se han vuelto altamente peligrosas por la acumulación de agua. En redes sociales, pidieron a los ciudadanos revisar las condiciones antes de salir de casa.
Durante las primeras horas de la tormenta se reportaron acumulados de hasta 25 centímetros de lluvia en algunas áreas del sur de California, lo que provocó el arrastre de escombros y múltiples afectaciones. Medios locales informaron que al menos tres personas perdieron la vida en incidentes relacionados con el temporal, entre ellas un hombre en San Diego tras la caída de un árbol.
En el condado de San Bernardino, cuerpos de emergencia trabajan en el desvío de corrientes de agua y en labores de rescate para auxiliar a personas que quedaron atrapadas en sus viviendas o vehículos, especialmente en comunidades como Wrightwood.
Zonas costeras como Pacific Palisades y Malibú permanecen bajo vigilancia especial, debido al riesgo de deslaves tras los incendios ocurridos a inicios de año. En el norte del estado, autoridades también alertaron sobre el desarrollo de una tormenta peligrosa en el área de la bahía de San Francisco, mientras que en la Sierra Nevada se prevén intensas nevadas.
Para este viernes, se espera un último episodio de lluvias fuertes, con acumulaciones adicionales de entre 2.5 y 7.5 centímetros. El Centro de Predicción Meteorológica emitió una alerta de nivel 2 de 4 por riesgo de inundaciones para más de 18 millones de personas en el sur de California. Según los pronósticos, las condiciones meteorológicas comenzarían a mejorar a partir del sábado.






