PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Un operativo conjunto entre el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional permitió el desmantelamiento de un campamento presuntamente utilizado por integrantes del crimen organizado en la zona serrana de la comunidad Pabellón de Hidalgo, al norte del estado.
La acción se llevó a cabo el sábado 26 de julio tras denuncias ciudadanas sobre la presencia de hombres armados y movimientos inusuales. Durante la intervención, se reportaron enfrentamientos y bloqueos carreteros. Un total de 27 personas fueron detenidas, 18 de ellas vinculadas a presuntos delitos de competencia federal, y otras 9 por cargos del fuero común.
El fiscal general del estado, Manuel Alonso García, informó que no se localizaron laboratorios clandestinos en el lugar, pero sí se aseguraron 19 armas largas, equipo táctico, cargadores y chalecos balísticos. Señaló que el sitio operaba como centro logístico y de movilidad para presuntos miembros del crimen organizado.
Las autoridades indicaron que, durante la intervención, los presuntos agresores intentaron huir y provocaron disturbios en varias localidades, incluyendo bloqueos con vehículos incendiados y ataques a establecimientos. Los actos violentos se registraron principalmente en los municipios de Rincón de Romos, Pabellón de Arteaga y Aguascalientes capital.
En respuesta, el gobierno estatal reforzó los operativos de seguridad con patrullajes aéreos y terrestres, vigilancia en las cinco principales entradas al estado, y el despliegue de tecnología de monitoreo mediante el C5i. Se intensificó también la vigilancia en los límites con Jalisco y Zacatecas.
Por su parte, colectivos de búsqueda de personas reportaron que al menos cuatro de los detenidos podrían estar relacionados con casos previos de desaparición forzada. Las autoridades señalaron que ya se trabaja en la verificación de identidades para esclarecer si alguno de ellos tiene ficha de búsqueda activa.
El titular de Seguridad Pública estatal, Antonio Martínez Romo, afirmó que las labores de vigilancia continuarán con apoyo del helicóptero “Fuerza Uno” y presencia permanente en zonas de difícil acceso.
Las investigaciones sobre este hecho continúan a cargo de la Fiscalía General de la República y la Fiscalía del Estado, en coordinación con fuerzas federales y estatales.