PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alerta sobre los riesgos para la salud asociados con largos periodos de tiempo sedentario, especialmente en el ámbito laboral. Según expertos de la institución, permanecer sentado durante más de cinco horas al día puede tener graves implicaciones para el sistema cardiaco y respiratorio.
Enrique Gómez Álvarez, profesor titular del posgrado en Cardiología clínica de la Facultad de Medicina de la UNAM, señala que el estilo de vida moderno, que requiere largas horas de inactividad, puede causar estancamiento en las funciones cardiovasculares, lo que a su vez aumenta el riesgo de problemas de salud.
A la par, un reciente estudio realizado por investigadores del University College London respalda estas afirmaciones, asegurando que reemplazar el tiempo sedentario con solo unos minutos de ejercicio moderado al día puede tener un impacto significativo en la salud del corazón.
Los resultados de la investigación sugieren que incluso pequeñas cantidades de actividad física pueden marcar la diferencia en la salud cardiovascular.
En México, donde muchas personas trabajan largas jornadas, la situación es especialmente preocupante, explica la UNAM. Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, millones de mexicanos trabajan en el sector de servicios, con jornadas que a menudo superan las 35 horas semanales.
Ante esta realidad, el Dr. Gómez Álvarez enfatiza la importancia de buscar formas de activar el cuerpo durante el día laboral para contrarrestar los efectos negativos de la inactividad prolongada.
El especialista recomienda que todas las personas realicen al menos 30 minutos de actividad física moderada de forma regular, preferiblemente aeróbica, como caminar, andar en bicicleta o nadar. Esta recomendación es especialmente relevante considerando que, según diferentes encuestas, aproximadamente el 70% de los mexicanos no realizan ningún tipo de ejercicio.
Por ello, la UNAM hace un llamado a tomar medidas para combatir el sedentarismo y promover un estilo de vida más activo, tanto en el ámbito laboral como en la vida cotidiana, destacando que conservar la salud es fundamental tanto para los individuos como para las empresas en términos de productividad y bienestar general.