PODER Y CRÍTICA | El párroco de la “Divina Providencia de Chetumal”; Rafael Olivera Guerra señaló que en los festejos de la virgen de Guadalupe se vio un desbordamiento de fe, siempre cuidando los protocolos sanitarios en el caso de las familias que llegaron de diferentes puntos de otros municipios e inclusive de Campeche, para estas festividades. Hizo un llamado para seguir las fiestas decembrinas con los cuidados sanitarios y evitar regresar a colores negativos de la pandemia.
Se calculó la visita de poco más de 12 a 16 mil peregrinos que se dieron cita de varios destinos tanto del municipio de Othón P. Blanco, así como de ayuntamientos cercanos y hasta del estado de Campeche.
El párroco comentó que es un “desbordamiento de fe” lo que se vivió con los festejos de la virgen de Guadalupe y por ello, se tuvo cuidado en el manejo de los protocolos sanitarios.
Mencionó que continúa el festejo, ya que siguen llegando peregrinos y además las diferentes parroquias de Chetumal han realizado misas y la eucaristía para las familias que se han dado cita para festejar a la “madre de México”.
Explicó que tanto en mercados, domicilios, el santuario de la Virgen de Guadalupe, así como en las parroquias se vivió el fervor y devoción para una de las imágenes más importantes para los católicos.
Hizo un llamado para todas las familias para que se cuiden estos protocolos y que no se regrese a colores negativos en el semáforo epidemiológico estatal y federal.
“Tenemos que cuidarnos para que sigamos en este camino de salud y fe por un bienestar de las familias quintanarroenses, es un llamado para cuidemos todos los protocolos sanitarios y que sigamos siendo bendecidos”, apuntó el párroco.
Información Samuel Caamal
