Méroda, Yucatán, 16 diciembre, poder&crítica.-Una camioneta arrastró varios metros al triciclo, lo impactó con un taxi y cruzó una llanta sobre la cabeza del ciclista.
El accidente generó que decenas de personas se reunieran a lo largo del cerco perimetral para ver las diligencias forenses.
Familiares acudieron poco después y rompieron en llanto al ver el cuerpo. Intentaron ingresar al cerco perimetral, pero la Policía lo impidió debido a que se realizaban las acciones de ley.
“No, flaco, no quién lo mató, dónde está”, se preguntaban entre ellos y a oficiales de la Policía Municipal.
Peritos reportaron que la camioneta transitaba a exceso de velocidad, pues desde el lugar en que ocurrió el choque hasta donde quedaron el cuerpo y el automotor había más de 30 metros.
Testigos indicaron que escucharon el impacto y vieron “volar” el cuerpo, luego la camioneta le cruzó encima.
“Fue algo horrible, no voy a poder dormir”, indicó un testigo. El accidente ocurrió a tres metros de donde se venden tortas y tacos.
El ahora occiso fue identificado como César David Sansores Guillén, de 45 años de edad, quien se dirigía a vender en su puesto de cochinita.
De acuerdo con los datos, el hoy fallecido transitaba a bordo de su triciclo de sur a norte sobre la 68, en el mismo sentido venía la camioneta Honda CRV de modelo reciente y con placas YMW-251-B, manejada por Vanesa Estefanía Puerto Piña.
Por el exceso de velocidad y la falta de precaución de la guiadora, la camioneta arrolló al triciclo.
Éste fue arrastrado y se impactó con el taxi con placas 1216 YSB, que se encontraba estacionado; a consecuencia del golpe el ciclista salió proyectado y cayó en el arroyo vehicular, y la camioneta cruzó la llanta delantera izquierda sobre la cabeza de Sansores Guillén. La muerte fue al instante.
La guiadora sufrió crisis nerviosa y la auxiliaron paramédicos municipales, aunque fue detenida y puesta a disposición de la Fiscalía General del Estado.
Durante dos horas esa calle estuvo cerrada para las diligencias de ley, unos vecinos encendieron veladoras y rociaron agua bendita para orar por el eterno descanso del difunto.
Decenas de personas se arremolinaron para ver las diligencias de levantamiento del cadáver.
En otro asunto, un automóvil Mazda y un Yaris protagonizaron aparatoso accidente de tránsito la mañana de ayer en la calle 39 con 60 del Centro. Se reportó un herido, con golpes leves.
El Mazda lo conducía una empleada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y el Yaris, un empleado de una financiera.
Aunque la funcionaria sólo tuvo un golpe en la muñeca, tres ambulancias —dos de la Secretaría de Seguridad Pública y una particular— llegaron para auxiliar a la joven, que requirió un pequeño vendaje.
El delegado federal de la Profeco en Yucatán, José Antonio Nevárez Cervera, llegó para auxiliar a la joven.
Los guiadores alegaron tener luz verde, por lo cual el peritaje determinaría la presunta responsabilidad, aunque testigos aseguraron que la guiadora del Mazda cruzó en rojo.
Los daños se valuaron en poco más de 200,000 pesos.— David Chan Caamal
Choque ¿”Semaforazo”?
Dos guiadores alegaron tener luz verde del semáforo; el peritaje de la SSP determinaría al responsable.
Datos
El Mazda 3 con placas YWL-627-B y manejado por una joven, al parecer asistente personal del delegado de la Profeco, transitaba de poniente a oriente sobre la calle 39.
Colisión
Al llegar a la 60 el auto se impactó con el lado izquierdo de un Yaris, placas ZBP-858-B, el cual transitaba de sur a norte. Los vehículos se proyectaron y chocaron con la guarnición de la acera.
Menos daños
Las bolsas del aire del Mazda se activaron, lo que evitó daños en la guiadora del mismo.