Washington, Estados Unidos, 27 febrero; poderycritica.-El Presidente Donald Trump ya no quiere más filtraciones de información de su gobierno a la prensa.
Para ello, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, está tomando acciones que no le están gustando mucho a los empleados de la Casa Blanca, reportó The New York Post.
En una reunión con personal de la Administración federal, Spicer le pidió a los empleados colocar en un lugar específico sus celulares, para revisarlos, según ese diario y Político.
Esos medios agregaron que Spicer le pidió asesoría al consejero de la Casa Blanca, Don McGhan, antes de llamar a la reunión y “revisar los teléfonos”.
Fuentes del Gobierno de Trump indicaron que Spicer aseguró que las aplicaciones de mensajería cifrada, como Confide y Signal, violan una ley federal.